Monday, January 21, 2013

La refrigeradora fría

Era una mañana hermosa. Al levantarme me estire y observe fuera de mi ventana el bello día que me esperaba. El cantar de las aves se mezclaba con los coquetos susurros del viento, formando una melodía la cual me seducía a pasar tiempo con la madre naturaleza.
Anote estos pensamientos en mi libreta, al lado de los temas de conversión para cuando me encuentre con la chica que me gusta y debajo de mi itinerario de estados para publicar en Facebook.
El día parecía perfecto hasta este momento. Mi estomago me hizo acuerdo de su existencia, hora de prepararme el desyuno. Al llegar a la cocina, me di cuenta que no todo seria perfecto...
Me acerque lentamente a la refrigeradora, nunca nos llevamos bien, ni si quiera cuando aun tenia garantía. Abrí su puerta y estire mi brazo para alcanzar la bandeja llena de spaghetti que mi mama me había traído el día anterior. La falta de calor me rodeo, mi alma fue envuelta por los demonios de los dos polos de la Tierra. No pude soportarlo mas.

- ¡¿Por que siempre eres tan fría conmigo?! - grite de tal manera que me quede sin aliento.

No obtuve respuesta, arroje de vuelta la puerta con la fuerza de mis músculos y de mi decepción. Corrí de aquella tortura... corrí sin mirar atrás.
Había sido víctima de frialdad por parte de mi refrigeradora por demasiado tiempo. Han pasado mas años de los que recuerdo, aun no puedo olvidar aquella sensacion prohibida de calor que me ofrecía cada vez que yo con tanto esmero revisaba su interior para encontrar algo que calmara mis entrañas. Es por esto que he decidido terminar ya mi dolor.
Lo siento refrigeradora, no se que fue lo que hice para que tomaras aquella actitud vacía ante mi. Tal vez fue por el foco que se te quemo y no remplaze hasta después de ocho meses, o porque te deje caer de la camioneta cuando te compre. Sea cual sea la razón, te pido disculpas desde el fondo de mi ser.
Julieta, no te termine porque quería enfocarme en mis estudios para darnos una mejor vida en el futuro. Fue porque habías subido mas de cuarenta libras, y simplemente.... no, asco.
Adiós.

2 comments:

  1. Jajaja xD está genial, me hizo reir. Pobre Julieta u_u Fuera de eso, cómo se te ocurren estas cosas? xD Te lo dije, deberías ser escritor. ^u^

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  2. No sientas lastima por Julieta, fue su decision merendar hamburguesas y hotdogs enormes todas las noches.
    Como se me ocurren estas historias? Simplemente se me viene una idea a la mente y de ahi es cuestion de construir sobre ella. A lo largo de los años, he desarrollado una forma de pensar capaz de intercambiar entre la realidad y el absurdo. Me gusta ver las cosas de manera normal y al recordarlas las hago absurdas. Me entretiene, pero parezco loco riendome solo estando sentado en una banca del parque.

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